Placeres culposos, primera parte

Todo mundo (sin exepción) tiene un placer culposo que prefiere mantener en secreto para evitar andar dando explicaciones y eso, pero hoy he decidido confesarles todos los que me vengan a la mente en los próximos veinte minutos. Algunos ya los había contado antes y otros son totalmente inéditos, así que ahí les va: 1) Últimamente vivo pegado a Oblivion y me encanta, es el juego de Xbox que más he jugado hasta ahora y que seguiré jugando mientras funcione el condenado aparato. 2) Yo era fan de la serie de TV Felicity (super ridícula y cursi) y me encantaba oír la canción del principio hasta el cansancio (jajaja), lástima que no la encontré en goear.com para que checaran dato. 3) Me encanta el mazapán, es el único dulce que comería con gusto a cualquier hora y en cualquier lugar (más que el chocolate). 4) La ropa que más me gusta la uso hasta que literalmente se desintegra por culpa de tantas lavadas; eso sí es desquitar el precio de compra y no jaladas. 5) Soy tan maniático de lavarme las manos que siempre cargo gel antibacterial para cuando no hay donde lavarme (pero tienen que admitir que es muy práctica esa cosa). 6) Las películas que nunca aceptaría que me encantaron: La boda de Muriel y La Chica de Rosa, con mi novia: Molly Ringwald (favor de googlear el nombre si no saben quien es). 7) En mi juventú estaba convencido de que Rhythm Nation 1814 era el mejor disco en toda la historia de la música, hoy ya no soy tan clavado, pero me sigue gustando y por eso los dejo con este videíto para que se distraigan un rato. De momento no hubo forma de explayarme un poco más, pero seguramente después regresaré con la continuación de este post. ¿Cuándo? quien sabe, pero algún día lo sabremos. Síganse divirtiendo, niños y niñas. ^_^